Otro año más llega la cabalgata de reyes, quizás uno de mis días favoritos del año.
24 niños y sus respectivos padres nos damos cita delante de mi portal para pedir a gritos «carameloooos», yo la primera....
Este año los bomberos fueron los más animados , gritaban por el megáfono: ¡ya llegan los bomberos, con muchos caramelos!» y hay que reconocerlo, las madres lo dimos todo...¿Será por el mensaje del chat «cena de mujeres» de feliz año....?
Bueno, que me pierdo, centrándome en la cabalgata:
Carrozas, trenes, barco pirata, zancudos...Muy similar a la del año pasado, aunque sus Majestades pasaron a toda máquina, casi no nos dió tiempo a distinguirlos. Pero bueno, los niños se quedaron encantados.
Despues subimos todo el batallón a casa y a por el chocolate con churros del Timón y roscón de Glaccé. Aquí os dejo varios trucos:
Este año para no esperar la laaarga cola de la pastelería decidí comprarlos antes y congelarlos. La técnica: los congelas tal cual como te los dan envueltos, con el papel amarilllo y los envuelves en dos bolsas de plástico. Para que estén en su punto se sacan unas 10-12 horas antes y los dejas descongelar.
Para un evento de tan multitudinario sale fenomenal, si eres muy sibarita y tienes tiempo lo mejor es comprarlo en el día. Realmente a mi me gustán más recien hechos, pero a todo ¡no llego!
Los churros del Timón, pequeñitos pero matones, me puedo tomar unos 20 seguidos, también tienen truco: recién hechos, los congelas, y antes de tomar los sacas del congelador y metes en el micro sobre 10 - 15 segundos. Y estos sí que están iguales. Pero tienes que respetar los tiempos y congelarlos recién hechos, sino ya no sirve.
En cualquier caso, los congeles o no, el azúcar es mejor echárselo justo antes de tomarlos.
Otros detalles, para los celíacos, el chocolate del Timón: se puede tomar porque no lleva harina.
La verdad es que este año estuve tan apurada que no me dió tiempo a sacar fotos de los preparativos. Pero bueno, fue chocolate con churros y roscón., algo de salado (aceitunas y anacardos) para los cerveceros y para los que se tomaron un rico Gin tonic.
Este día es algo caótico pero yo me lo paso bárbaro: los niños suben dejan abrigos, zapato en la entrada para el regalo de después, y a tomar el chocolate. Después entrada de cine y a la sala de proyección (peli de Disney) no se mueven durante 30-45 minutos. Los más pequeños a la sala de juegos.
Mientras los padres meriendan y tomar sus copitas en el salón.
El cierre llega con los regalos para todos los niños. No es fácil encontrar 24 regalitos iguales, y que no se vayan mucho de presupuesto y variar todos los años, pero siempre aparece alguna cosa. Este año tocó yo-yó. La verdad es que los mayores ya no se emocinan tanto , el año que viene lo voy a tener más difícil...
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